Call of Duty se mantiene como una de las franquicias más influyentes del género FPS y Acción en primera persona, y para muchos jugadores es una parte elemental de la industria que a pesar de contar con muchos altibajos siempre nos deja espacios de conversación en la comunidad y también ha servido como brújula para ver hacia dónde se dirige el mercado de los juegos multijugador. Sin embargo, en los últimos años, esa chispa que hacía de Call of Duty algo único parecía haberse apagado, dejándonos con entregas que, aunque competentes, carecían de la magia y el impacto de antaño. Después del desastroso Modern Warfare 3 de cual lo calificamos como uno de los peores de la saga por su descarado contenido reciclado. Ahora con Black Ops 6 se tenían dudas al respecto, pero afortunadamente Treyarch consiguió recuperar gran parte de lo que hizo especial a Call of Duty.
La historia de Black Ops 6 pudo ser mejor elaborada
Call of Duty siempre ha destacado por gameplay frenético y accesible. En ocasiones con escenas exageradas sacadas de las películas más palomeras de Hollywood. Black Ops 6 no es la excepción, pero creo que aquí en cuanto la historia y el nivel de las escenas se mantuvieron en la línea de lo verosímil, aunque añaden un poco de fantasía y libertad creativas relacionando los conflictos reales con el mundo de Call of Duty. El haber abordado la guerra del Golfo Pérsico fue un gran acierto en la línea temporal de Black Ops ya que la serie dio comienzo con el conflicto de la guerra fría y como tema central, la guerra de Vietnam y con Black Ops 6 cierra con un conflicto pos guerra fría justo en un conflicto autorizado por Naciones Unidas y que extraoficialmente podemos decir que se prolongó hasta la captura de Saddam Hussein.
Y este conflicto es algo que me hubiera gustado ver mejor llevada en la trama del juego pero la historia se desvía por conflictos propios de la serie con personajes ficticios y una organización ficticia que nada tiene que ver con el conflicto histórico y son relegados a simples referencias. Hay momentos que la historia se desvía tanto que las misiones se basan en descubrir quién está detrás de las armas químicas; algo que está relacionado con un rumor histórico donde Estados Unidos acusó que Saddan mantenían en su poder armas químicas. Al final este desarme resulta relacionarse con el modo zombies como parte del argumento principal.
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La campaña de Black Ops 6: Un buen dinamismo que le hacía falta a Call of Duty
La jugabilidad se mantiene de forma tradicional de cada lanzamiento. Esta vez añadieron nuevas dinámicas de juego que resultaron bien ejecutadas. En algunos momentos hay misiones de espionaje y existe una base de la cual podemos mejorar con dinero que se encuentre en la misiones principales. Es un elemento curioso que aporta nuevas armas, armamento y cierta rejugabilidad para completar todas las tareas secundarias de la base. Incluso hay un puzzle de una caja fuerte que debemos descubrir dentro de la base.
Dentro de las misiones principales los enemigos han variado dando algunos momentos para enfrentamiento contra unas clases de jefes de zonas los cuales incluso tienen barra de vida. inconsistente. A veces, los cambios en la dificultad de los oponentes pueden ser demasiado bruscos, haciendo que la experiencia de juego sea desigual. En general estos elementos le sentaron muy bien para terminar con esa monotonía y costumbrismo al cual nos tenían agobiados. Lo mejor de esto es que precisamente por estos elementos es que este juego ya no tiene momentos de acción tan exagerados e inverosímiles como los tuvieron algunos otros juegos donde los personajes realizaban acciones sobrehumanas que los hacían ver indestructibles y que incluso llega a verse como una película de serie B.
Buenos gráficos pero ya necesita renovarse
Visualmente, Black Ops 6 se siente como una extensión de las entregas anteriores. No hay grandes mejoras gráficas, y aunque el nivel de detalle sigue siendo impresionante, sería ideal ver un avance que justifique su lanzamiento en una nueva generación de consolas. Las animaciones, texturas y efectos de iluminación cumplen su función y logran sumergirnos en los escenarios, pero a veces se sienten reciclados y poco novedosos. Además, me encontré con algunos problemas técnicos menores, como glitches de texturas, que aunque no arruinaron la experiencia, pueden resultar un tanto molestos.
En el apartado sonoro, Call of Duty siempre ha sobresalido, y Black Ops 6 mantiene esa tradición con una banda sonora épica, efectos de sonido envolventes y un trabajo de doblaje que se mantiene en la línea de lo que podemos esperar de un doblaje de calidad. El diseño de audio es excepcional, logrando que cada disparo y explosión se sienta real y que cada paso en el campo de batalla nos mantenga alerta. Sin duda, este es uno de los aspectos que sigue elevando la experiencia general del juego.
Un multijugador con un toque de frescura
Siempre se ha tratado de añadir nuevos aportes a este modo. Pues a fin de cuentas es por lo que todos los jugadores se quedan y sin duda es lo que ha sostenido a la serie y mantenido vigente. Ahora un nuevo aporte del cual hablamos desde su beta pretende ser la mayor novedad del multijugador. Sin duda lo es, pero no al nivel de lo que los avances y las promociones habían prometido. Pero es algo que muchos jugadores han sabido aprovechar y eso habla muy bien del juego. Por todo lo demás el multijugador se mantiene exactamente igual, aunque se han criticado el rediseño de algunos mapas clásicos como Nuketown que ahora parece ser más amplio. Otros mapas inéditos ya destacan por sus excelentes diseños.
Black Ops 6 es el trato digno que merecía la saga
Call of Duty: Black Ops 6 es lo que le faltaba a la serie para salir de esta rutina de la cual tanto se le ha criticado al juego. Hay nuevos aportes en la jugabilidad de la campaña y el multijugador. Algo que no se había visto al menos desde 2019, porque Modern Warfare 2 y Modern Warfare 3 fue una repetición de lo que había funcionado de los clásicos; Un remake a todas luces.
Esta vez sí se esforzaron, pero la historia de la campaña es algo que queda a deber, nuevamente eluden los conflictos reales para dejarlos como simples referencias históricas y centrarse en el puro lore de Call of Duty. Algo que no está mal del todo, pero pudo haber funcionado mejor si el conflicto principal se centrara en lo que propone que estaríamos viendo. Y entiendo que esto es algo que hemos visto en otros juegos, pero al menos en Black Ops de 2009 sí habían elementos de la trama relacionados directamente con los conflictos históricos reales. Cómo olvidar cuando buscaban asesinar a Fidel Castro o el desarme nuclear de cuba; conflictos reales que fueron bien complementados con los elementos ficticios del juego.
Si eres un veterano de Call of Duty que ha perdido la fe en la saga, te recomiendo darle una oportunidad a Black Ops 6. Puede que no sea perfecto y que aún haya margen para mejoras, especialmente en el apartado técnico y en la innovación del gameplay, pero es un juego que recupera gran parte de la magia que hizo grande a Call of Duty. Treyarch ha puesto la vara alta para futuras entregas, y ojalá este sea el comienzo de una nueva era para la franquicia.