La iniciativa la presentó el diputado Antonio Cuéllar Steffan.
La iniciativa presentada por el diputado del Partido Verde (PVEM), Antonio Cuéllar Steffan, promueve modificaciones a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, y advierte que los videojuegos con contenidos violentos o sexuales representan un riesgo para el comportamiento, desarrollo mental, sano entendimiento y relaciones sociales de niños y niñas, «que por su estadio de desarrollo psicosocial se encuentran en una posición más vulnerable frente a esos contenidos».
Las personas que vendan este tipo de contenidos a menores de edad, podrían alcanzar una multa de hasta los 30 mil días de salario mínimo, que equivale a más de dos millones de pesos.
El documento, que fue turnado a la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, afirma que la actual legislación carece de las garantías necesarias para evitar la venta de materiales que puedan disminuir la integridad física y mental de menores de edad.
El diputado sostiene que en las leyes se deben identificar los factores contribuyentes a la desequilibración del sano desarrollo mental de la infancia, entre los que encontramos a los videojuegos.
Según un estudio sacado de centros estadísticos del país, en el año 2013, 17.7 millones de personas en México juegan al menos una hora con este tipo de materiales.
Se plantea que se añada un artículo 68 Bis y que se reforme la fracción IV del artículo 148, para que se establezca que los distribuidores y comerciantes de videojuegos no puedan vender o poner a disposición de niños, niñas y adolescentes, todos aquellos juegos con clasificación para adultos, incluso cualquier título que incite o promueva la violencia o la apología del crimen y que afecte el desarrollo integral de los mismos.
