A veces el juego final no es como lo pintan al principio.
Casi siempre cuando se anuncia o se presenta un juego por primera vez al público, suele levantar mucho hype. Entre las características que suelen llamar más la atención de los aficionados encontramos las mecánicas de juego, historia, innovación, y cómo no, los gráficos. Desafortunadamente en muchas ocasiones las empresas presentan juegos con gráficos deslumbrantes y ambiciosos, sacados de gameplays capturados en etapas tempranas de desarrollo que, al final, terminan siendo notablemente inferiores. A continuación repasamos algunos de los mayores escándalos de downgrade en los últimos años.
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Alien: Colonial Marines
Un juego de la pasada generación tristemente recordado por ser uno de los peores lanzados en la industria. Al principio los asombrosos tráilers que Gearbox lanzó previo a su llegada a las tiendas hacían suponer que iba a ser un tremendo juegazo. Lastimosamente, a la hora de salir al mercado terminó siendo una decepción total. Gráficamente lucía fatal, nada que ver a lo mostrado en sus avances, y ni qué decir del terrible gameplay con el que contaba.
Dark Souls II
From Software ha demostrado ser una empresa capaz de pulir gráficamente sus juegos a un nivel excepcional (Rise of The Tomb Raider). Sin embargo, hace algunos años cuando anunció Dark Souls II que en videos de avances y gameplays lucía gráficamente espectacular, aún para ser un juego de pasada generación. Cuando el producto final vio la luz fue como darnos una patada en las costillas porque los gráficos llamativos que prometía se esfumaron. Tras una serie de quejas de parte de los usuarios, a la casa desarrolladora no le quedó de otra más que aceptar el tremendo downgrade que había aplicado y disculparse con la comunidad. Su remake para la nueva generación, Scholar of the First Sin, mejoró considerablemente la calidad gráfica, pero aún dudamos que supere a lo que en un principio se mostró.
The Order: 1886
Uno de los títulos que hasta la fecha sigue siendo de los más sorprendentes gráficamente hablando de la nueva generación también sufrió un downgrade. Los avances mostrados por Ready at Dawn y Sony eran simplemente extraordinarios. La decepción fue total cuando llegó al mercado bloqueado a 30 frames por segundo, y peor aún, con esas inauditas bandas negras en la pantalla. Lo corto de su campaña y su repetitivo gameplay terminaron sepultando lo que inicialmente fue un juego prodigio.
Watch_Dogs
Uno de los escándalos que más resonaron en su momento, y quizás uno de los más recordados hasta la fecha. Ubisoft presentó este juego a finales de la pasada generación, y podíamos ver una increíble e innovadora propuesta que creíamos revolucionaría a la industria a futuro. Tanto gráfica como técnicamente lucía increíble, casi parecía algo imposible de hacer. Pero era demasiado bueno para ser verdad y terminó siendo un juego sumamente pésimo en cuanto a detalle, que aún con ideas buenas, nadie esperaba. Hasta se lanzó una versión para Wii U que fue igual de pésima.
The Witcher III: Wild Hunt
¿Qué podemos decir sobre esta joya? Simplemente una obra maestra, uno de los títulos más premiados y aclamados de los últimos años. Y no es para menos, cada uno de las características que lo componen están perfectamente creadas. Sin embargo, la última aventura de nuestro cazador de monstruos favoritos Geralt de RIvia también pasó por un downgrade. CD Projekt RED tuvo que reducir algunos de los efectos y detalles gráficos que pudimos apreciar en su presentación inicial con el fin de que el juego fuera estable en ordenadores de todas las gamas.¡Ah! y para que las consolas no se quedarán en pañales al intentar correrlo. Aún con esto, The Witcher III: Wild Hunt es y seguirá siendo uno de los mayores éxitos de la presente generación.