La duración no es es su fuerte.
No todos los videojuegos están hechos para consumir tu vida. Si bien existen los que te toman más de 100 horas para llegar a ese preciado 100%, hay algunos otros que todavía después de muchos años siguen sin tener fin ya sea en su historia o mundo. Y esto puede variar aún más dependiendo el género del que se traten. Si eres de los que no puede o no quiere dedicar muchas horas de su vida a terminar al 100% un videojuego y prefieres ir rápido y directo a tu objetivo, este es tu top.
Tabla de contenidos
NÚMERO 5: Homefront
Homefront nos presentó un futuro quizás no muy incierto… Corre el año 2025 y luego de una serie de acontecimientos Corea invade Estados Unidos. El objetivo de nuestro protagonista es liberar a su país de las fuerzas militares coreanas, abriéndose paso en una campaña bastante corta. La dificultad tampoco era un gran reto, por lo que pasarse cada capítulo de la campaña era rápido aún en el nivel de dificultad más alto. Afortunadamente, Homefront, como la mayoría de juegos de este estilo, cuenta con multijugador que de alguna manera hacía más “larga” la experiencia. Sin embargo, al no obtener el éxito o popularidad de otros juegos como Call of Duty, el multijugador murió rápidamente.
NÚMERO 4: The Order: 1886
Uno de los juegos más recientes de esta lista. The Order: 1886 nos lleva a un Londres alternativo en el que una vieja orden de caballeros intenta mantener el orden entre los humanos y una raza de monstruos. Su campaña es capaz de completarse en un total aproximado de 5 horas y media, algo bastante extraño tomando en cuenta que es un juego de nueva generación en la que prácticamente no hay limitaciones en cuanto a duración de un videojuego. Otro punto negativo en la duración de juego es que hay muchas cinemáticas.
NÚMERO 3: Killzone 2
Una de las mejores exclusivas de la pasada generación fue Killzone 2 para PlayStation 3. Para su tiempo, Killzone 2 contaba con unos detalles gráficos excelentes, una jugabilidad bastante buena y un multijugador muy frenético. Desafortunadamente, su campaña, aunque muy buena, era muy corta y dependiendo la experiencia que tuvieras jugando este tipo de videojuegos podía ser aún más corta o más larga. Lo bueno que en altos niveles de dificultad algunos niveles sí eran un verdadero reto y sí o sí te costaban algunas horas extra para poderlos pasar.
NÚMERO 2: Ryse: Sons of Rome
Uno de los juegos más prometedores y deslumbrantes antes de su salida era Ryse: Sons of Rome. Aparte de mostrar el gran poder gráfico de la Xbox One en su salida, mostraba también una campaña llena de violencia, sangre y acción, combinación bastante atractiva en los últimos años. Su modo de juego es el de un hack ‘n slash, en el que tienes que abrirte camino machacando a tus enemigos uno a uno usando interesantes y sangrientas técnicas de combate. Su gran defecto es la duración, son ocho actos de juego que pueden pasarse en alrededor de 5 horas, junto a un modo online y offline llamado Gladiador que tampoco compensa su corta duración que dejó a todos con ganas de más.
NÚMERO 1: Mirror’s Edge
Uno de los mejores juegos en primera persona de la generación pasada es Mirror’s Edge, cuyo objetivo principal es correr a toda velocidad para huir de nuestros enemigos. Mirror’s Edge es un juego de parkour bastante emocionante, pero definitivamente muy corto. Su libertad de movimiento por las azoteas, tejados y conductos de ventilación a lo Spider-Man era de lo mejor, pero la diversión se terminaba pasadas apenas las 5 horas de juego. El lado bueno es que hay otros modos de juego que extienden de alguna manera la duración, pero que no son suficientes para saciar nuestras ganas de más en el modo historia.
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