Destroy All Humans! Se ha posicionado como un clásico de Xbox, hasta la fecha aparece cada vez que pasamos lista a los juegos más representativos de la consola. En estos tiempos de remasters y remakes no es de sorprenderse que lo trajeran de vuelta. Pasó con muchos clásicos como Crash Bandicoot. Yo imaginaba que, Destroy All Humans!, sería un remaster y mi sorpresa fue encontrarme con un remake muy bien ejecutado. Conociendo que THQ fue resucitada por Nordic Games, pensaríamos que llegaría con un presupuesto un tanto ajustado como para no llevarlo a la escala de Remake. Pero como dije, el presupuesto y trabajo invertido en este remake han valido la pena.
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Una historia que vale la pena prestar atención en cada uno de sus diálogos
La historia de Destroy All Humans parte de una premisa sencilla que justifica todas las motivaciones del protagonista: Ambientado en la década de los 60’s, Estados Unidos hacía ensayos de sus naves en plena carrera espacial. Un accidente ocurre cuando un cohete lanzado por Estados Unidos choca contra un OVNI. Crypto, nuestro protagonista, es enviado para una misión de rescate, pero éste desafía las órdenes y exige venganza. Es ahí donde parte la invasión alienígena. La historia tiene tintes de humor tanto en diálogos como situaciones que se dan dentro del juego y su gameplay.
Algunas sátiras parten del contexto y época en que se desenvuelve la historia. Un ejemplo claro de esto es en un momento del juego cuando el Alcalde culpa al comunismo por la invasión alienígena. Es curioso e interesante interpretar estos diálogos en nuestro actual contexto, pues más allá de la afrenta que Estados Unidos tuvo contra el comunismo, podemos interpretar que los gobiernos siempre señalarán a un culpable y negarán sus responsabilidades. En los 60 y hasta principios de los 90 fue el comunismo; en el nuevo milenio es el neoliberalismo y los conservadores. ¿mañana que será? Reflejada en sátira o situaciones jocosas, incluso en forma de metáfora (si vamos más allá de una interpretación lineal de la historia) el ritmo y discurso narrativo es muy interesante y nos mantiene atentos a la trama.
Así se juega Destroy All Humans!
En su aspecto jugable, Destroy All Humans! es muy sencillo. Desde el principio del juego, la desarolladora te remarca que se respetó fielmente todo el contenido de la versión original, incluyendo la trama y mecánicas de juego. Sabiendo esto, no es sorpresa que veamos tengamos en nuestro control una jugabilidad sumamente sencilla. Cada misión se puede completar en diez minutos. Esto repercute en el ritmo jugable, pues la primera mitad del juego las misiones se resumen en destruir ciertas estructuras, trabajar con sigilo, y soportar oleadas. Es repetitivo y la dificultad se endurece entrando a la segunda mitad del juego; donde aparecen nuevos enemigos que hacen un poco más interesante la jugabilidad.
En algunos momentos del juego puedes usar el platillo volador, y, a mi consideración, es la parte más divertida del juego, destruir estructuras, edificios, vehículos y tanques con el platillo volador es muy satisfactorio. Si nos toca ir a pie tendremos distintos tipos de armas que se nos irán otorgando, según vayamos avanzando en el juego. No quiero entrar en detalles de las armas porque sería como revelar spoilers, pues cada uno de ellos tienen cierta particularidad en la que se pueden alternar según en la situación en la que nos encontremos.
Existe un árbol de habilidades que desbloquean mejoras para el personaje o el platillo. Ambas se resumen en mayor capacidad de munición, mejoras de escudo, y aumento de potencia. No hace falta hacer gran cosa para ir obtener habilidades, bastará con solamente avanzar al juego e ir potenciando lo que más convenga.
Destroy All Humans! no tiene mucho espacio para la rejugabilidad, además de completar todo el árbol de habilidades, hay misiones de desafíos y coleccionables en cada misión. El juego se puede sentir un tanto corto para lo que estos acostumbrados actualmente.
Gráficos dignos de un buen remake
Tratándose de un remake, gráficamente el juego es muy bueno. Las texturas y el diseño de personajes es muy llamativo, sobre todo en Crypto. Puede ser que se quede corto en algunos NPC en el que su diseño se repite constantemente, el entorno y el motor gráfico utilizado para el juego están muy bien implementados. La música es típica de su contexto, pero no hay melodía que destaque, además que algunas suelen repetirse mucho. El juego ha llegado traducido al español de España y con voces en inglés. Al parecer THQ Nordic no tiene interés de al menos darnos subtítulos en Español Latino.
En conclusión, Destroy All Humans! es un buen remake; con esto me refiero a que se ha respetado todo el contenido del su título original, mejorando significativamente los gráficos, así como el sonido. Como fiel representación, trae consigo algunos elementos anticuados y un ritmo que traído a nuestros tiempos se nos hace corto y repetitivo.
